Con Los años después exorcicé la tragedia personal

Jonathan Reverón confiesa que sólo una vez ha llorado lo que experimentó en la tragedia de Vargas, después de que el deslave lo obligó a abandonar junto con su familia el edificio en el que vivía en Los Corales y tuvieron que caminar hasta el aeropuerto de Maiquetía en espera del helicóptero que los rescatara de esa pesadilla. Esas lágrimas que compartió con Marianella Salazar, conductora del programa de radio que producía, le permitieron cerrar prontamente las heridas.Hace dos años los recuerdos --que nunca borró-regresaron con más persistencia a su memoria, pero ahora como una experiencia lejana, en la que evocaba más la atmósfera que los diálogos del momento.Empezó entonces a plasmar lo que vivió en una serie de cuentos, que no mencionan directamente la tragedia ni relatan detalles del deslave, pero están contextualizados en ella.Lo importante en esas narraciones son las desdichas de sus personajes.Las historias las recopiló en un libro, Los años después , que presentó en la más reciente edición del Festival de la Lectura Chacao. Quien terminó de inyectarme el veneno necesario para hacer ficción fue Leonardo Padrón, con quien trabajé en la producción radial de Los Imposibles . Como en mi vida el tema de Vargas siempre ha estado presente, pensé que el libro era ideal para exorcizar la tragedia personal. Aunque siempre he dicho que mi familia...

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