A Carlos Andrés Pérez no lo dejaron morir en su patria

Carlos Andrés Pérez falleció en el exilio. El régimen no le permitió morir en su patria, como él lo había solicitado. La respuesta fue clara: Si pone un pie en tierra venezolana será detenido y sometido a juicio. Tenía un proceso abierto por las declaraciones que dio poco antes del referéndum revocatorio que se efectuó en agosto de 2004: Chávez solo saldrá por la fuerza. Nacido en Rubio el 27 de oc tubre de 1922, se incorporó a la política desde muy pequeño y siempre como miembro de Acción Democrática. Habiendo finalizado sus estudios de bachillerato en el liceo Andrés Bello, se dedicó de lleno a la actividad gubernamental a partir de la caída de Isaías Medina Angarita, al ser nombrado secretario privado de Rómulo Betancourt, que presidía la Junta Revolucionaria de Gobierno, y luego secretario de gabinete. Durante la dictadura de Mar cos Pérez Jiménez fue detenido y, luego de pasar un par de años en prisión, fue expulsado. Estuvo exiliado en Panamá, Cuba y Costa Rica, donde trabajó como jefe de redacción de un diario y coordinaba con los miembros de la resistencia la lucha contra el gobierno militar. Regresó al país a los pocos días de la huida del dictador y participó en la campaña electoral mediante la cual Betancourt obtuvo la Presidencia de la República. Como consecuencia de las ilusiones que se crearon en América Latina con el triunfo de la Revolución Cubana, un sector importante de la juventud de Acción Democrática optó por las armas como la vía para construir un sistema político que siguiera los parámetros cubanos. Carlos Andrés Pérez fue el hombre que desde el Ministerio de Relaciones Interiores se enfrentó a la vio lencia fomentada por el Partido Comunista de Venezuela y el desprendimiento de AD, que tomó el nombre de Movimiento de Izquierda Revolucionaria. En 1963, el triunfo electoral de Raúl Leoni ratificó la derrota militar y política de los que pretendían repetir la experiencia cubana. En 1972, luego de haber ocu pado la Secretaría General de AD y habiendo conocido que Betancourt no optaría por un segundo mandato democrático, llegó a la Presidencia de la República con una campaña electoral novedosa, basada fundamentalmente en los medios audiovisuales. Era el hombre de los paltós a cuadros, las patillas largas y los brazos en alto. El hombre que camina, que va de frente y da la cara. En sus primeros años de go bierno, los precios del petróleo se disparan y anuncia que administrará la abundancia con criterios de escasez. El país...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR