Operadores de Amuay buscan en Colombia mejores sueldos y seguridad

Amuay es un calenbero, afirma Juan José Montero, uno de los miembros del Consejo Comunal de la urbanización Alí Primera. Se le interrumpe el relato para preguntar: ¿Qué es un calenbero? Para no decir una mala palabra, así le decimos aquí a algo que no sirve o no funciona, responde.Petróleos de Venezuela ase gura que la refinería de Amuay opera a 73% de su capacidad, es decir, de un nivel de procesamiento de 655.000 barriles de crudo por día está recibiendo 480.000 barriles, volumen que la empresa considera aceptable si se toma en cuenta que en los 6 meses siguientes al 25 de agosto de 2012, cuando ocurrió la explosión en el complejo, su capacidad bajó a menos de 50%.Las personas que todavía ha bitan en el sector Alí Primera insisten en que antes del accidente había un olor muy fuerte, que era evidencia de que había una fuga. Cuentan que viven con sobresaltos porque el miedo aparece cada vez que el tamaño de la llamarada del mechurrio tiene más de tres metros, es negra con poco amarillo y sin tono azul.Los trabajadores se persig nan cuando entran, muchos no quieren estar allí. Hay soldadores y operadores de refinerías y grúas que se están yendo a Colombia, donde están más seguros y les pagan más dinero, indica Montero.Pdvsa está buscando gente para trabajar en Amuay, pero los salarios son muy bajos y no hay seguridad, afirma.Refieren que cerca de 600 ve nezolanos han laborado en la ampliación y modernización de la refinería de Cartagena, muchos de ellos después de la explosión y con mayor fre cuencia desde octubre. Indican que la solicitud de personal ha aumentado después de la tragedia en Amuay, y el principal incentivo es que les ofrecen hasta ocho veces más de lo que ganan en Venezuela.Pdvsa o alguna de sus con tratistas pagaría entre 16.000 y 20.000 bolívares al mes, pero en Colombia reciben una remuneración en pesos que al negociarla al tipo de cambio del mercado paralelo les genera cerca de 140.000 bolívares al mes.Voy y vengo una vez al mes.Tomo un carrito hasta Maracaibo, luego agarro el autobús y en la mañana estoy llegando a Cartagena, relata un operador de grúa que por años trabajó como contratado en Amuay y en la planta de Car dón, que forman el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR