Rafael Esquivel: Como no me quiero ir, resisto la crítica

Los años le han dado experiencia al momento de enfrentarse a cualquier entrevista. Moverse durante tanto tiempo dentro de las huestes de Conmebol, le ha hecho aprender hacerlo como un zorro viejo dentro de la dirigencia del fútbol internacional. Rafael Esquivel es considera do por muchos como un villano. Y aunque no le gusta el papel, 25 años después de haber asumido la presidencia de la Federación Venezolana de Fútbol FVF, se acostumbró a lidiar con eso y mucho más. No es que sea de hierro. Tam bién tengo sentimientos, dijo el dirigente del fútbol nacional. Yo siento y padezco. A veces me molestan las ofensas. Pero estoy en un cargo público y susceptible de crítica. Y si no la resisto, debo irme. Y como no me quiero ir, la resisto, explicó días atrás desde su despacho. Cuando me sucede algo im portante, intento tener tranquilidad. Mis tratos son sopesados y calmados. A veces me ofusco. Pero el presidente de un banco en el que trabajé me decía: `lo más importante es darse cinco segundos de reflexión. Y si no lo hiciste, date cinco minutos para revisar tu acto?. Eso lo hago de manera permanente, recordó. Su historia. Rafael Esquivel Me lo nació en las Islas Canarias en 1946. A Venezuela llegó con su familia, como muchas otras en tiempos de inmigración. Su historia, como la de otros tantos de los que hicieron de Venezuela, su país, es la que los estadounidenses llamarían la de un self made man un hombre autodidacta. Comenzó como mensajero de un banco y terminó escalando posiciones hasta convertirse en un hombre de negocios. Al fútbol está ligado desde 1972 como vocal de la asociación de fútbol de Nueva Esparta. También fue directivo del extinto Pepeganga Margarita. En 1987 asumió como presi dente ad honorem de la Federación Venezolana de Fútbol, Laureano González podría en lugar del fallecido René Hemmer. Ni siquiera teníamos como pagar su funeral, recordó. Pasé nueve años pagándome el hotel y el traslado de mi bolsillo para dirigir a la FVF. Son cosas que no se saben, pero que tampoco digo para lucirme. Era la realidad de la FVF, porque no había otra cosa. Hasta el sol de hoy dirige al fútbol nacional y aunque habla de generaciones de relevo, no quiere hablar mucho de su sucesor. serlo. Con él...

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