La otra revolución

Cuando los cantos de sirena llegaron envueltos en promesas de una revolución que había fra casado en Cuba y Europa Oriental, llenaron de falsas ilusiones la cárcava que había provocado la corrupción y socavó la mala administración de gobiernos que le dieron la espalda a la nación.Cantos entonados por coros de golpistas y asesinos. Fueron aquellos que el 4-F en frentaron la Constitución y las leyes, los mismos que, de delincuentes e insurgentes, se transformaron en falsos héroes. Era la revolución que con falacias y mentiras pretendía engañar y justificar la injusticia profunda tomando el sendero equivocado, el medio que no ha reconocido, como se pretendió con un fin de justicia social correspondiente al agotamiento de un modelo democrático convertido en promesa vacía que, según ellos, agonizaba, para dar paso a una nueva visión de patria que se autodenominó V República y se vendió como revolución.La revolución comenzó por agredir todo lo institucionalmente establecido. La guerra declarada a las leyes y costumbres de ese momento, bajo premisas como que existía una oligarquía que oprimía al pueblo, sometiéndolo a intereses extranjeros con axiomas inventados como ser rico es malo. La meta de la revolución fue acabar con los ricos y para lograrlo pulverizó a la cla se media. Su primer gran paso fue convertir en menesterosos a los más pobres, borrando del horizonte la esperanza de toda ilusión de una vida mejor para el pueblo venezolano.La revolución que hoy recla ma Venezuela es una que acabe con los pobres, no con los ricos, que reconozca la necesidad de crear riquezas, puestos de trabajo, producción nacional y soberanía alimentaria, todas las...

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