En la sustitución de cultivos impera la improvisación

Venezuela ha aumentado la cantidad de tierra que dedica al cultivo y a las actividades pecuarias, pero la producción ha disminuido. Ahí están las toneladas de alimentos que se importan y la inmensa cantidad de dólares que se destina para tal fin.

La semana pasada, por primera vez, el presidente Hugo Chávez increpó por cadena de radio y televisión a Jaua y a Loyo para que le entregaran los resultados de la cosecha de arroz en el antiguo hato El Frío, donde -contra todas las recomendaciones de los expertos- sembraron 51 hectáreas de arroz en terrenos tipos 6 y 7, que sólo admiten la cría de ganado por el escaso contenido de nutrientes. Loyo había anunciado que la cosecha alcanzaría cerca de 35.000 toneladas, pero todavía no ha presentado cifras reales.

La lista de fundos, fincas, hatos y haciendas administradas por el Estado se han multiplicado de manera exponencial, así como la visibilidad de los dos funcionarios que han estado al frente de los rescates: Elías Jaua y Juan Carlos Loyo. Jaua, en su condición de vicepresidente ejecutivo, y Loyo como ministro de Agricultura y Tierras. Lo que sí mantienen ocultas son las estadísticas de producción. Aunque todos los ministerios del ramo poseen páginas en Internet, al igual que los entes adscritos, ninguno publica resultados de las cosechas. Anuncian lo que van a sembrar, pero nunca cuánto sembraron y qué recogieron.

Jaua, sociólogo graduado en la UCV que militó con los grupos más radicales de la ultraizquierda, propugna una economía centralizada y dentro de la más férrea ortodoxia leninista. No admite la iniciativa privada y es un ferviente defensor de la propiedad social. Igual que Loyo, nunca ha sido agricultor ni ha tenido con la tierra otro contacto distinto de las piedras que lanzó como encapuchado. Sin embargo, fue quien anunció que los terrenos que ocuparon los indios tacariguas en los valles de Aragua debían dedicarse a la horticultura, sin un estudio científico-social que lo recomendara.

En 2007, con motivo del 150 aniversario de la insurrección de Ezequiel Zamora en los valles de Aragua, el presidente Hugo Chávez emitió el Decreto 3578, mediante el cual ordenaba la ocupación de los predios con suelos tipos 1 y 2 ociosos o infrautilizados. Desde entonces se han "rescatado" 5.832 hectáreas en el eje Aragua-Carabobo, donde se cultivaba principalmente caña de azúcar.

Numerosos predios pasaron al Estado, aunque no estaban subutilizados, porque no poseían la cadena de titularidad o porque el...

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