Votar o abstenerse

Lo primero que hay que hacer ante una elección presidencial y parlamentaria es disponerse a votar, incluso cuando hacerlo no constituya una conducta obligatoria.El Congreso Nacional, en una decisión que tuvo tanto de ingenuidad como de oportunismo, cambió el sistema de inscripción voluntaria y voto obligatorio por el de inscripción automática y voto voluntario, enviando a los ciudadanos un mensaje tan frívolo como este: no se molesten en inscribirse y tampoco en ir a votar.El oportunismo de la decisión estuvo en que los parlamentarios creyeron que, de esa manera, iban a congraciarse con los ciudadanos que no quieren hablar de deberes.La ingenuidad radicó en creer el cuento de que con voto voluntario los candidatos tendrían que reencantar a los ciudadanos y entusiasmarlos con ir a los locales de votación. ¿Quién dijo que había que reencantar una actividad la política que nunca en la historia...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR