El camión de Polar cala en la comunidad de Catia

En la mañana, muy temprano, el camión cargado con las bebidas sale del depósito de Polar situado en Catia, una de las parroquias más pobladas de Caracas. De lunes a sábado y de 6:00 am a 2:00 pm, la presencia del vehículo entre la calle Argentina y el bulevar es un hecho tan cotidiano que su dueño se ha hecho amigo de transeúntes y comerciantes. Juan Carlos Rodríguez es franquiciado de Polar desde hace 24 años. Con el apoyo financiero y técnico de la empresa compró el camión que reparte cada día 8.000 y 2.000 cajas de cerveza y malta, respectivamente, a abastos, frigoríficos, licorerías, restaurantes y kioscos, entre otros. Les suministramos produc tos a 41 clientes en una relación cordial y transparente que lleva mucho tiempo. Polar nos da crédito y nosotros a los clientes. Agrega que cuando decidió trabajar por su cuenta, la franquicia lució muy atractiva y Polar le dio asistencia técnica y financiera para montar un negocio familiar que em plea a tres ayudantes. Su empresa se llama Mich Kath CA, combinación de los nombres de sus hijos Michel y Katherin. Siente que ha prosperado en una actividad que tiene un efecto multiplicador en la comunidad porque los comercios atendidos generan empleo directo a 250 personas, aproximadamente. Luego de tantos años en la calle, la gente te saluda, te cuenta sus problemas y alegrías y lo que está pasando, dice. Por esta comunicación fue que se enteraron de las penurias, como consecuencia de las lluvias de septiembre de 2010...

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