Legislatura azul y turbulenta

El color rojo del PSOE quedó completamente borrado del mapa político de España, después de una jornada en la que el PP alcanzó el mejor resultado de su historia. El próximo gobierno de Mariano Rajoy tendrá una gran alfombra azul de 186 diputados para pasar plácidamente por el Congreso todas las decisiones que necesite, sin pactos ni consensos con nadie. Lo que sufrió el PSOE este domingo fue una auténtica catástrofe, al romper su piso histórico 118 escaños en 1978 y perder en las 17 comunidades autónomas españolas. Alfredo Pérez Rubalcaba pidió anoche públicamente la convocatoria de un Congreso ordinario para definir el nuevo liderazgo de los socialistas, y la guerra interna está servida con Carme Chacón, quien también recibió un severo correctivo en Cataluña al perder el pulso con los nacionalistas de CiU. Pero más allá de la tragedia roja, la holgada mayoría parlamentaria del PP está lejos de expresar una nueva mayoría social en España. En marzo de 2008, Rajoy perdió las elecciones con 10,2 millones de votos; este domingo las ganó con prácticamente la misma votación: 10,8 millones. La gran diferencia estuvo en la debacle socialista, que en poco más de tres años pasó de 11,2 millones 2008 a menos de 7 millones 2011. ¿A dónde fueron más de cuatro millones de votos? Algunos se quedaron en casa, pero la mayoría se atomizó en una...

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