El renacimiento de Alex Torres

La guerra de Alex Torres contra el descontrol fue feroz, de muchas batallas. Desde que debutó en las ligas menores de los Angelinos de Los Ángeles en 2006 a los 18 años de edad, hasta 2012 su relación poncheboleto apenas superó el 1.00 y sólo en 2010, en la sucursal doble A de los Rays de Tampa Bay, llegó a cerrar con 2.14. Ser un pitcher con una tasa elevada de boletos le impidió consolidarse en las grandes ligas, pese a que su talento y su recta de más de 90 millas por hora lo incluyeran año tras año en la lista de los mejores prospectos del sistema de Major League Baseball.Tampa Bay siempre supo que el carabobeño, de 25 años de edad, era un diamante en bruto con la imperante necesidad de ser pulido, algo que aseguró su presencia con las Águilas del Zulia en el beisbol profesional venezolano en la temporada 2010-2011 4-1 con 1.91 de efectividad y en la 2012-2013 2-4 con 4.48, eso sí, bajo la supervisión de la organización y con estrictas limitaciones. Sus pasos debían ser seguros.Estar bajo la tutela de Wil son Álvarez en los rapaces fue trascendental para Torres, que pese a ser considerado en ocasiones un zurdo sin rumbo siempre caminó con la frente en alto, a la espera de tiempos mejores. Un ligero cambio en su mecánica para lanzar lo ha hecho renacer de sus cenizas y ser uno de los mejores relevistas intermedios de la Liga Americana esta temporada al amanecer el viernes con la mejor efectividad entre sus homólogos con más de 20 innings lanzados 0.38. Su tremenda mitad de campaña lo ha erigido en un brazo de confianza y en un serpentinero estudioso, siempre con un plan en mente.Torres ya no sube al montículo a hacer pitcheos rápidos con el objetivo de ponchar rivales, sino con la misión de sacar outs con inteligencia y sin ponerse más presión de la necesaria. Su cambio fue del cielo a la tierra y su renacimiento un hecho comprobable con números.El zurdo ha ponchado a 31 en 24 episodios trabajados, en los cuales apenas ha dado ocho boletos y permitido seis imparables. Además tiene par de victorias en sus registros, su WHIP es de 0.58 y su relación ponche-boleto es de 3.38, la más alta de su carrera.Lo que estoy viviendo este año es increíble, dijo Torres por teléfono minutos después de hacer el relevo del jueves contra los Astros de Houston. Me he ganado a pulso la confianza del manager Joe Maddon, quien ya sólo me utiliza en momentos de apremio y no cuando tenemos mucha ventaja en el pizarra. Desde que me dieron la oportunidad de subir...

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