Cadáver exquisito

El país desde lejos es un cadáver exquisito que ni Breton: una ministra que se medio desnudó, descubre, oh sorpresa, que varios pilotos de carreras de carros estaban estafando al Estado a través del ministerio que ella, paradójicamente, conduce. Y resulta que la chica se ha puesto bravísima pero no contra los delincuentes o el sujeto que, enviado por su despacho, llegó a Bulgaria con casi medio millón de euros en cash, sino contra quienes le han criticado aquel desnudo. Envidiosos, escribió la titular del despacho en Twitter, cuando en realidad tampoco es que esté taaan buena: una piel acorde con su edad, poca cintura y mucha keratina y maquillaje, el clásico look de las recién llegadas al poder. Admirable, eso sí, el arrojo cuando publica una foto reciente abrazada con la hija de Chávez en un viaje a Toronto, adonde fueron hace poco a no sé cuál evento, sin ninguna vergüenza por explicar con qué dinero viajó la hija de su benefactor ni con qué dólares la Chávez paga sus compras en un mall de Canadá, furiosa a su vez porque la fotografiaron en eso. ¿Ahora no puedo ir ni a un centro comercial?, defendió su privacidad en un acto típicamente cadivista y sifrino.Más allaíta, Maduro insiste en ser titular con una amenaza interesante: los ministros se deben incorporar a la milicia. Interesante, digo, porque cabe suponer que eso implica entrenamiento, aprender a disparar, dar en el blanco `ta difícil Giordani, mantenerse en forma, saber entender una orden y cumplirla, ponerse de acuerdo con el resto de la tropa y superar el miedo a la hora de una sampablera. Interesante, insisto, pero no porque semejante esfuerzo les haría abandonar sus deberes cotidianos es un chiste, ¿ok?-, sino porque me encantaría apostar en cuánto tiempo ese tren ejecutivo destruye la milicia, lo que convierte la situación en eso que los expertos en mercadotecnia llaman ganar-ganar: adiós a los ministros y adiós a las milicias. Aunque para que acaten semejante orden, Maduro debería quintuplicar el presupuesto de la organización, de manera tal que sea lo suficientemente...

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