Carros de Venirauto producidos desde 2008 se deterioran en patios

Es la hora del almuerzo y los obreros de las dos líneas de ensamblaje de la empresa venezolano-iraní fundada en 2006 deambulan por los alrededores de la planta, en la zona industrial de Maracay. Un trabajador, que prefirió no identificarse, está sentado en la acera, esperando que se reanude su turno. Detrás de él hay un inmenso estacionamiento en el que se ven cientos de vehículos ensamblados, estacionados muy juntos, incluso sobre las áreas verdes del lote. Están acumulados aquí, algunos desde 2008, porque les faltan piezas que vienen de Irán por barco. Están deteriorándose, llevando sol, agua y tierra. Así se echan a perder los rodamientos, se quema la pintura y se mancha la tapicería. En julio eran más de 1.000, dice. Ahora hay cerca de 700, producidos entre 2008 y 2011, con desperfectos. La acumulación de vehícu los es una vista cotidiana para quien recorra la Autopista Regional del Centro. Una imagen incomprensible para el venezolano de a pie que acude a la puerta de la planta y a los siete concesionarios del país para anotarse en listas de espera Âque datan de hace más de tres años con la esperanza de adquirir un carro. Letargo productivo. En 2007, cuando se inauguró la empresa gracias a un acuerdo suscrito con el Gobierno de Irán en 2006, se ofreció al público un vehículo confiable, accesible y a bajo precio, y una planta que ensamblaría 16.000 carros anuales con partes suministradas por el país persa. La intención era satisfacer el mercado con un producto concebido fuera de los parámetros de ganancia de la empresa capitalista, según lo promovido por el Ejecutivo. Venirauto cumpliría esa pro mesa, una compañía binacional compuesta por Corpivensa organismo del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Industria, con 49% de las acciones, y Aidco una sociedad formada por las 2 ensambladoras más grandes de Irán: Saipa e Iran Khodros con 51%. La expectativa fue tal que para ese mismo año 30.000 personas se encontraban en lista de espera para la adquisición, según el entonces ministro de Industrias Ligeras y Comercio, William Contreras. Después de 4 años, los pre cios de los 2 vehículos ofrecidos ÂTurpial y Centauro han aumentado entre 337% y 397% con respecto a los montos iniciales. Asimismo, el ensamblaje anual ha sido menor a lo anunciado: entre 5,23% y 13%. En total se han ensamblado 8.528 automóviles, la mitad de lo que se había prometido como producción anual. Los indicadores reflejan que la planta se encuentra sumida en un letargo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR