Los consumidores reconocen que los controles acentúan la escasez

Para los venezolanos la escasez de productos de la cesta alimentaria se ha vuelto crónica. En enero los anaqueles de los supermercados reportaron fallas en el inventario de leche en polvo, carne de res de primera, aceites comestibles, café, azúcar y margarina. Este año además de la ausencia de algunos alimentos, los consumidores sufren la ausencia de marcas de toallas sanitarias, pañales, champú, crema dental, enjuague bucal, papel higiénico y servilletas entre otros productos de cuidado personal y limpieza del hogar.

Un estudio realizado por Datanálisis entre 800 personas revela que para 51,3% de los entrevistados es negativa la situación de abastecimiento de alimentos en los lugares donde realizan normalmente las compras para su hogar. La medición que se realiza desde agosto de 2007 señala que ha habido picos de escasez de productos. En febrero de 2008, 76,6% de los entrevistados sostuvo que el abastecimiento de productos era negativo, en septiembre de ese mismo año bajó a 61,2%. En julio de 2009 se ubicó en 59,5% y en marzo de 2010 subió a 68,2%.

Se advierte que por la devaluación se podría acentuar la falta de productos que dependen de insumos importados que antes se pagaban a la tasa cambiaria de 2,60 bolívares y ahora se deben comprar en el exterior a 4,30 bolívares.

Además existe un rezago entre los costos reales de producción y los precios regulados. El precio de la carne de res en 17,60 bolívares el kilo no se incrementa desde agosto de 2008. Los ganaderos sostienen que los costos se han elevado y la producción nacional no es rentable. En lugar de ajustar los precios, el Gobierno ha optado por importar, pero la devaluación ahora también pone en riesgo el abastecimiento del producto traído de Brasil y Argentina.

En el caso las pastas de trigo, el último aumento se produjo en mayo de 2009. Las agroindustrias reportan en 21 meses de precios congelados, pérdidas por el alza de la materia prima internacional, mano de obra, costos de producción, inflación interna y el efecto de dos devaluaciones.

Los aceites comestibles de maíz, mezcla y girasol tienen 20 meses sin que se incrementen los precios. En junio de 2009 el Gobierno decidió bajarlos, y ahora se registran altos costos de producción por el encarecimiento de la materia prima, salarios, y otros componentes.

El control de precios fue aprobado el 6 de febrero de 2003 y publicado en Gaceta Oficial el 11 de ese mismo mes. En 8 años de aplicación, no se ha logrado frenar la inflación. El...

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