Delincuentes de otros municipios asaltan y secuestran en El Hatillo

Los habitantes de El Hatillo padecen los embates de una delincuencia cada vez más especializada que consiguió en esta zona de clase media un oasis para delinquir.

Los robos y hurtos a quintas y apartamentos se han convertido en el principal dolor de cabeza de los vecinos, aunque los índices delictivos del municipio no sean los más alarmantes de Caracas.

El principal problema en El Hatillo es el déficit de funcionarios policiales que brinden seguridad a sus casi 150.000 habitantes. A esta situación se le suma el hecho Âque se ha convertido en lugar común dentro de las estadísticas delictivas del país de que las víctimas temen denunciar.

Sin embargo, el comisario Ángel Rincón Aguana, director de Polihatillo, reconoció que en la mayor parte de su jurisdicción son frecuentes las incursiones de bandas delictivas dedicadas a desvalijar residencias.

"Lo que hacen los hampones ahora es que interceptan a las víctimas en otros municipios u otros sectores de sus urbanizaciones cuando van en sus carros, y los obligan a llevarlos hasta su vivienda. Una vez allí, aprovechan para llevarse todos los objetos de valor que encuentren, y dejan amordazados y amarrados a los moradores para poder escapar", explicó.

Un caso recientemente atendido por este cuerpo policial ocurrió el domingo 28 de agosto a las 10:30 am en el edificio Ópalo de la urbanización El Cigarral. Allí un grupo de delincuentes se hizo pasar por visitantes, sometió al vigilante e ingresó a 2 apartamentos.

Organización vecinal. El comisario Rincón señaló que en vista del déficit de agentes que hay en el municipio, se han tenido que organizar con los consejos comunales y las asociaciones de vecinos para coordinar estrategias que los ayuden a combatir el delito.

"Las mesas de trabajo con las comunidades, las reuniones semanales con los vecinos ayudan a saber qué se puede hacer con los recursos que contamos. Hay planes para la instalación de botones de pánico, reactivar el sistema de radio vecinal a fin de que cada vecino que lo desee pueda tener una comunicación directa con la policía a través de transmisores y, además, que las garitas y equipos de vigilancia privada ayuden más en cuanto al asunto de las alertas", dijo el comisario.

Ricardo García, vocero de la comunidad de La Boyera, concordó en la necesidad de alertar a la policía, aunque considera que en muchas ocasiones las garitas y los vigilantes privados son un simple elemento decorativo ante la incursión de los delincuentes.

"El...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR