Lluvia convierte la avenida Caurimare en un río

Los vecinos de la avenida Caurimare y de la calle Caicara de Bello Monte sufren a diario. En el primer caso, cuando llueve, un río pasa por el frente de las casas, producto del desbordamiento de un bote de aguas servidas en plena avenida. En el segundo caso, el cerro ha invadido la parte trasera de las viviendas debido a la falta de drenajes. Arcadia Villarueda trabaja frente al bote de agua. Dice que perdió la cuenta de las veces que ha visto a los trabajadores de la alcaldía mientras destapan la tanquilla, pero que al tiempo vuelve a rebosarse. En la mañana amanece seco, pero cuando en las casas empiezan a hacer oficio sale el excremento, se queja. El bote de aguas negras tiene más de año y medio tapado y queda justo frente a la Clínica Caurimare y prácticamente al lado de la iglesia. Cuando no llueve, se ve un hueco en el que cualquier desprevenido pudiera caer. Vicente Orts cree que a él le tocó la peor parte, pues su vivienda está afectada por todos los flancos. Además de las aguas servidas que recorren la acera, la montaña en la que se construyó la calle Caicara se está desmoronando y hace dos años la tierra se metió en su galpón. Explica que todo fue provocado por la ruptura de una tubería de Hidrocapital, que hizo que toda esa agua filtrara el cerro y lo diluyera sobre su hogar. Cuando llueve todo el ba rro se mete en nuestro taller. Ya hemos perdido 60 metros de galpón. En algún momento quisimos sacar los escombros y los policías municipales vinieron a multarnos porque los colocamos en la vía. Cuando vieron cómo quedó la estructura nos ofrecieron disculpas, cuenta Orts...

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