El alma de la fiesta

El whisky no necesita presentación en el país. Nadie duda ante la mención de los números 12, 18 y 21, en reuniones entre amigos, cuando se hace referencia a la bebida que ha hecho famosa a Escocia y que ha encontrado en el venezolano un consumidor tan fiel que, incluso en tiempos de crisis, hace los ajustes necesarios para disfrutar del trago favorito. Son muchas las razo nes por las que el whisky no parece una opción apropiada en Venezuela. La más evidente es, posiblemente, el clima: este destilado, de 40 grados de alcohol por volumen, tiene entre sus ca racterísticas la capacidad de ofrecer al cuerpo humano el calor que niegan los fríos inviernos del norte de Europa. De hecho, fue este clima pe renne, que hacía casi im posible el desarrollo del viñedo, lo que impulsó el desarrollo de la destilación de la cebada, el cen teno y otros granos. Sin embargo, la cuenta pendiente del venezolano con el whisky es romper los mitos que ha crea do sobre el escocés. Como consumidor entusiasta ha cultivado prejuicios que recientemente han sido atendidos a través de publicaciones como Mi whisky, tu whisky, el whisky, de Alberto Soria, reeditado en una versión ampliada y corregida, y...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR