Alza de la gasolina genera rechazo

Bolivia estuvo semi paralizada por la huelga de transportistas en rechazo a una fuerte e inesperada alza en el precio de los combustibles de más de 80%, que provocaría una escalada inflacionaria y que anticipa una dura prueba económica y política para el Gobierno de Evo Morales. El transporte público era es caso, la totalidad de los choferes de autobuses lo acató, y el poco que prestaba servicios urbanos y de larga distancia, principalmente taxis, imponían unilateralmente aumentos de precios de hasta 100%. El gobierno tiene que hacer una abrogación de ese maldito decreto criminal que va directo a matar de hambre a los que no tienen fuente de trabajo, declaró el principal dirigente de la Central Obrera Boliviana, Pedro Montes. Adicionalmente, la primera protesta contra el llamado ga solinazo no afectaba a las vitales exportaciones minerales y de gas natural, que generan más de dos tercios de las divisas de la pequeña economía del país y financian las políticas sociales de Morales. Morales, estaba en Venezuela cuando fue anunciada el alza de precio, y guardaba silencio tras retornar a La Paz. Miembros de su gobierno trataron de explicar la aparente contradicción entre la dura medida y el buen momento macroeconómico del país, con cuatro años de sucesivo...

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