Aspiro a que antes de irme no haya muerto la democracia por la que luché

Solo aspiro a que antes de irme no haya muerto la democracia por la que tanto he luchado, con estas palabras clausuró Clarisa Sanoja de Ochoa el acto en el que varios académicos destacados del Derecho bautizaron un libro en su honor.El salón de sesiones del Pa lacio de las Academias sirvió de escenario para el homenaje promovido por la UCAB, la LUZ, la Federación Venezolana de Abogadas, el Colegio de Abogados del estado Zulia y el Banco Occidental de Descuento a una de las juristas pioneras en los derechos de las mujeres y de los niños en Venezuela.Con 90 años de edad y 70 de ejercicio profesional, Sanoja recordó su paso por la academia, la cárcel y el exilio por causa de la dictadura, además de sus aportes en las reformas del Código Civil en pro de la igual dad de género y la protección legal de los menores de edad.En su discurso también hubo espacio para la reflexión política. Venezuela requiere que sus hijos se fijen como meta recuperar la democracia, expresó.Alfredo Morles Hernández, individuo de número de la Aca demia de Ciencias Políticas y Sociales, expuso una semblanza de Sanoja. Destacó la manera como ejerce su profesión, la cual siempre ha estado fundamentada en la ética y en los valores...

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