Bailando bajo la crisis

La cáfila del alto gobierno cívico-militar, Bigotón al frente, nos tienen acostumbra dos a que ejerza potestad sobre todo, lo que hay encima o debajo del casi 1 millón de kilómetros cuadrados de territorio nacional y a que más de la mitad de los que vivimos en ese espacio seamos tratados como ciudadanos de segunda, por los querubines y serafines del régimen Jorge, Diosdado y Rafael, entre otros príncipes alados del coro de Corazón de Mi Patria, todos empeñados en que no haya dólares para la burguesía parasitaria, comida para la derecha apátrida ni gasolina en zonas bajo asedio fascista...Bigotón mueve la grupa, de nuncia un golpe, un pasito pa’lante, anuncia el Carnaval del siglo, un pasito pa’trás, compara los motorizados con la caballería de Bolívar, aprieta a su pareja, amenaza a quienes pretenden llevarnos a una locura igual a la de ciudades como Siria sic, sin dejar de hablar a veces toca tambor y le da con el codo como si fuese un auténtico anacobero y no un vulgar cobero... Y es que él nunca ha trabajado, ni siquiera cuando era chofer de Metrobús en jornadas nocturnas y montaba a la ahora primera combatiente la misma doñita que no lo suelta ni a sol ni a sombra, porque el fuero sindical le permitía ser reposero...Se puede medir la capacidad de trabajo de un presidente por el tiempo que le queda luego de restar las horas que invierte en atender a los medios, declarar, alardear, figurar...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR