La Bienal de Sao Paulo se resume en constelaciones

El arte es cuestión de lenguaje para un curador como Luis Enrique Pérez-Oramas, quien además de experto en arte mo derno es poeta de oficio. Las obras que presentó con el lema La inminencia de las poéticas en la trigésima edición de la Bienal de Sao Paulo podían ser leídas de múltiples formas. De este mismo concepto parten el historiador de arte Ariel Jiménez, la investigadora visual Lorena González y la galerista Carmen Araujo en Nuevos vínculos , una muestra a tres tiempos que presenta una selección de las propuestas exhibidas en una de las vitrinas más importantes del arte contemporáneo.Pérez-Oramas dividió en constelacio nes los ejes temáticos de la bienal. Esta misma estructura es imitada en Caracas por la Sala Mendoza, La Caja y la Hacienda La Trinidad. La primera fase de la exposición, la individual de Roberto Obregón, fue inaugurada el pasado domingo. Este fin de semana les toca el turno a la instalación, el videoarte y la pintura, entre otros lenguajes.La obra conceptual Archivo nacional , de los creadores venezolanos Juan Nascimento y Daniela Lovera, recibe a los espectadores en La Caja, en el Centro Cultural Chacao. La pieza propone una reflexión acerca de los discursos legítimos de la historia y la manera de alterarlos que tiene el poder. Mezclan los discursos del arte con la realidad del país, señala González.El irlandés Patrick Jolley, reciente mente fallecido, participó con una secuencia de piezas cinematográficas que llamaron la atención de la curadora por la contundencia visual de su discurso existencialista e irónico. Cuerpos que caen al vacío desde un bloque, un cadáver en una estación de trenes y una familia que arde en llamas son presentados en distintas secuencias con contenido...

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