Boca de Uchire siempre tiene novedades

Máximo Covault está bien contento con su nueva vida de posadero. No hay espacio para el arrepentimiento y mucho menos para abandonar el silencio y la paz frente al mar de Boca de Uchire. La casa que fue su refugio de fin de semana, se convirtió finalmente en la posada Coco de Agua.Al principio se ocupaba só lo los fines de semana, pero la tranquilidad pudo más que la solidez de una vida metido en los negocios más diversos.Ahora se levanta con la luz del sol, camina, es amigo de todos los vecinos, va a la pizzería que abrieron en el centro comercial, conversa y organiza actividades con el resto de los posaderos y hace compras para inventar el menú que ofrecerá a sus huéspedes.Son apenas seis habitaciones, todas con su baño, aire acondicionado, algunas con vista al mar, pero todas perfectas, sencillas y cómodas. Me encanta el saloncito de arriba con muebles daneses muy usaditos. El comedor está dispuesto para que cada grupo tenga su mesa con sus sillitas y su sombrilla.Lo mismo ocurre con las sillas en la playa. Entre cada dos palmeras hay dos sillas y un chinchorro si se trata de parejas o más si es una familia.El menú se coloca en una pizarra. Ahí advierten que si hay algo que no comes o no te gusta, lo digas de una vez para buscar un sustituto. La pareja que lo ayuda es afable y discreta. Si quieres conversar con Máximo está dispuesto. Si prefieres la privacidad, la tendrás.Hay una piscinita pequeña y cumplidora para refrescarse.Ideal para los niñitos que a veces se espantan con el mar.O para los padres temerosos.Una divinidad de posada. Pasamos un fin de semana exquisito. Echada el día entero tratando de sanar una gripe muy malandra.Lo que supimos. En esta esta día nos enteramos de que Héctor vendió la Posada de Mary, pero negado a abandonar a sus seguidores, construyó tres cabañitas frente al mar en el patio de la casa de su hermano. La quinta se llama Nuestro Sueño y está en el istmo Caribe, entre la laguna y el mar.Todas con aire acondicionado, baño, televisor y una parrillera para uso común. No hay servicio de comida. Son bien bonitas y las tienen impecables.Dos para tres personas y una matrimonial, todas con su porchecito adelante.Igualmente montó Héctor, una tienda especializada en deportes y ropa playera. Funciona en el centro comercial Costa Morena, justo al empezar el istmo saliendo del pueblo. Este lugar tenía casi todos los locales vacíos, le faltaba vida, así que los vecinos resolvieron ponerse las pilas y convertirlo en el...

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