El cine que más me interesa es el que se asemeja a la vida propia

De mirada reflexiva y temple serio, el director mexicano Michel Franco habla de Después de Lucía con las mismas pau sas y silencios que usó oportunamente en varias escenas de la película. El filme aborda de forma conmovedora el acoso Âtambién conocido como bullying que sufre la estudiante de secundaria Alejandra interpretada por Tessa Ía González, hermana de Gabriel García Bernal al mudarse de ciudad y cambiarse de escuela, después de la muerte de su madre en un accidente automovilístico. El segundo largometraje del cineasta, con el que obtuvo en mayo el premio mayor en la sección Una Cierta Mirada del Festival de Cannes, presenta un problema habitual no sólo entre los estudiantes de México, sino en el mundo entero. Franco revela que escribió el guión sin tener ese asunto como su principal motivación, sino lo que realmente le interesaba era el luto. Como director de cine no es mi labor concientizar. Sé que es un tema actual y por eso me pareció interesante, pues se ha minimizado y se ha tratado de forma superficial. Pero a medida que escribía encontré varias capas como la falta de comunicación entre padre e hija y la venganza. Con planos cerrados, sin mú sica más que la ambiental, diálogos cortos y silencios largos, la película atrapa al espectador desde que el padre y la hija viajan de Puerto Vallarta a Ciudad de México para empezar una nueva vida; de cómo su cotidianidad cambia con la falta de la figura materna, de las humi llaciones grotescas que recibe Alejandra después de que se filtra un video entre sus compañeros, hasta el duro desenlace, que en la proyección de...

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