Claves de la convivencia

"El respeto por el derecho ajeno es la paz". Con esa célebre frase de Benito Juárez, el conocido político mexicano, comienza la psicóloga Marisol Pulgar a hablar de ideas para una mejor convivencia. "Lo que personalmente practico, y confieso que muchas veces tengo que esforzarme en ello, es tomar perspectiva y enfocar mi empatía. En lugar de criticar, pensar: ¿para qué la otra persona tomó esa acción cuyas consecuencias me molestan? ¿Por qué me molestan? El principio es abrirse a comprender y conocer los intereses y motivos del otro". Para ilustrarlo, Pulgar usa un ejemplo aprendido en el curso de negociación de la Universidad de Harvard: "Dos personas peleaban por una naranja, hasta que conversaron y se dieron cuenta de que una la quería para hacer jugo y la otra necesitaba la concha para a hacer un dulce. En ese momento decidieron compartirla. Muchas veces hacemos lo mismo. Por eso en lugar de asumir y suponer, debemos abrirnos a conocer más, a ser empáticos", aconseja. Cristal Palacios Yumar, psicóloga y directora de Psiquearte, coincide en que la empatía es clave para convivir y la explica como esa capacidad que tenemos todos los seres humanos de ponernos en el lugar del otro y sentir sus emociones, o al menos imaginarlas. "Es como un músculo: se atrofia si no la usamos y se fortalece mientras más la ejercitamos. Entonces, ante una situación nueva o incómoda con otra persona o grupo, en vez de reaccionar, detengámonos a pensar y sentir: ¿qué le ocurre a esta persona?, ¿por qué reacciona o actúa de esta manera?, ¿qué emociones pueden estar detrás de esta conducta? y la más importante: ¿cómo me sentiría yo si estuviera en la misma situación?" Si bien es importante tratar de estar preparados para enfrentar escenarios en los que las acciones de otros desconciertan, también es importante saber qué hacer ante un conflicto. "Hagamos siempre el esfuerzo de explicar qué y cómo nos sentimos. De esa manera, no sólo estaremos alimentando nuestro músculo empático, sino que a través del ejemplo, estaremos estimulando el mismo ejercicio en el otro", aconseja Palacios Yumar. Sin embargo, hay situaciones en las que probablemente cueste mucho o llegue a ser imposible ponerse en lugar del otro, aun cuando se tenga la mayor disposición. "Pensemos que la empatía puede ser entendida también como el respeto del espacio físico y emocional de los demás. Así que si la situación nos abruma, se vale dar un paso atrás y tomar distancia hasta que se calmen los...

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