Continúa la maldición

E l maleficio, que desde 2014 arropa a las representaciones venezolanas en la Serie del Caribe parecía disipado después de los dos primeros cinco innings del juego entre Caribes de Anzoátegui y Criollos de Caguas de Puerto Rico.Los aborígenes dominaban la pizarra por cuatro carreras y Daryl Thompson lucía tan inquebrantable como estuvo en la ronda regular de la LVBP.La maldición solo jugó con las ilusiones venezolanas. Reapareció cuando el iniciador indígena recibió tres imparables consecutivos, en el sexto capítulo, y luego Anthony García le sacó la bola a Néstor Molina. El juego se igualó y se escribieron las primeras palabras del preludio de la fatalidad de Anzoátegui.El encanto de la isla ni si quiera se derrumbó con la carrera que impulsó Tomás Telis en la parte baja del séptimo. Eso solo fue un pequeño obstáculo para la victoria boricua, consumada con dos anotaciones en el octavo episodio. Una resultado de un hit de Jesmuel Valentín y la otra producto de una tiro malo a la tercera base por parte de Telis. Luego de caer el último out del juego, la pizarra señaló 6 a 5 la supremacía de Puerto Rico. Así será recordada la eliminación venezolana en la Serie del Caribe 2018 en Guadalajara.Es la continuación de las penas, pues desde que el certamen se disputa entre cinco equipos y no con cuatro, a par tir de 2014, las representaciones nacionales han clasificado siempre a las semifinales pero no han logrado el gallardete de la región. Es más, la...

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