Coprofagia: un mal hábito en los perros

Los perros adquieren hábitos que pueden molestar a sus dueños. Uno es la coprofagia, que es la costumbre que tienen estos animales de comer heces, sean suyas o ajenas. Es una conducta antihigiénica y que irrita a quien la observa.Sin embargo, todo compor tamiento tiene sus causas. En este caso, existe una amplia lista de posibles razones que motivan esta conducta.Problemas patológicos. In gerir las heces puede tener un trasfondo serio, por lo que es importante someter a la mascota a una consulta veterinaria cuando comienza a hacerlo.Es una condición médica, afirma Antonio Salcedo, médico veterinario. En ocasiones, aparece por algún malestar. Entre las enfermedades que causan este comportamiento se encuentran la insuficiencia pancreática, infecciones intestinales, gastritis o síndrome de mala absorción.El animal busca algo secundario para alimentarse, ve sus heces y se las come. Otro patrón es el exceso de alimentos altos en grasa, porque lo que más necesita el perro son las fibras, explica Salcedo.Trastorno de comportamiento. De igual manera, la copro fagia puede ser producto de factores psicológicos. Gustavo Carrasco, médico veterinario, afirma que puede tener sus bases en una necesidad de atención por parte del animal.Cuando es así, los regaños no funcionan. Si el propietario riñe al perro, la mascota lo verá como una muestra de cuidado hacia él. Esa respuesta logrará que la mascota asocie el hecho de comer sus heces con la atención recibida por su dueño, y continuará realizando la acción.Carrasco asegura que es posible que la conducta surja producto de una cuestión de dominancia como, por ejemplo, cuando convive más de un perro en un mismo hogar. Los caninos tienen un comportamiento de manada, y entonces el más sumiso puede empezar a comer los excrementos del dominante.Respuesta a sus sentidos. Los animales se guían por sus instintos. Hay momentos específicos en los que el comportamiento responde a sus necesidades o impulsos naturales. La coprofagia es común en las perras luego de un parto. Lo hacen por motivos de higiene: para mantener un espacio limpio en el que sus cachorros no estén en peligro de adquirir enfermedades.Los pequeños imitan el com portamiento de su madre.Eso es normal y desaparece con el tiempo. Pero si un perro adulto lo hace es una cuestión de conducta...

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