Descomposición petrodiplomática

La aceleración de nuestro empobrecimiento material es una de las evidencias de la recaí da de Venezuela en el bien conocido síndrome del petroestado. Algo de esto habíamos visto en las más breves bonanzas de los años setenta y ochenta del siglo pasado, pero esta nueva experiencia es de otra magnitud: la profundidad de los daños causados pareciera guardar proporción con la larga duración del ciclo de altos precios petroleros, y algo más. El caso es que el problema no se reduce a la economía ni esta, en su terrible precariedad, es la peor parte.Signo de una gravedad con muchos registros es la evidente contradicción entre, por una parte, las privaciones que han terminado por imponerse a los venezolanos en ámbitos tan esenciales como la salud, la seguridad y la educación, frente a una larga lista de ofensivas desmesuras gubernamentales. Para solo anotar algunos asuntos recientemente ventilados, recordemos la recurrente confirmación a los socios de Petrocaribe de que ese acuerdo y sus beneficios están blindados; la negación a reconocer ni investigar la corrupción nacional y transnacionalizada que se ha devorado cientos de millardos de dólares, a lo que se suma el vano intento de salir de la crisis con las mismas fórmulas que nos trajeron al despeñadero: desde las recurrentes visitas a supuestos socios estratégicos en busca de lo que estén dispuestos a dar y pedir a cambio hasta el discurso de la guerra económica, los desalmados criterios de otorgamiento de divisas preferenciales; para no hablar de las amenazas y medidas abusivas ante supuestas conspiraciones.En estos trechos la petrodi plomacia ha hecho su parte, entre opacos negocios y desfigurada solidaridad, en paralelo con un tenso, pero bien lubricado, manejo de pleitos y sordinas. En ese ejercicio exterior ha prevalecido el descomponer, de un modo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR