El deterioro se lee en el Foro Libertador

El 25 de septiembre la sala de lectura de la Biblioteca Nacional se inundó y se mojaron cerca de 300 libros de la sección de Literatura. Aunque los textos no se perdieron tuvieron que aplicarles tratamiento de recuperación. Lo que sucedió ese día fue un síntoma del envejecimiento del edificio, que funciona desde hace 23 años con un mantenimiento que no ha sido óptimo. El incidente ocurrió después de que comenzaron los trabajos para mejorar el sistema de aire acondicionado. Víctor Ontiveros, director de Bienes y Servicios de la Biblioteca Nacional, explica que se abrieron unas tomas de agua helada, necesarias para instalar las unidades reguladoras de aire Âque permiten mantener la temperatura y la humedad en ambientes cerradosÂ. Dice que la emergencia no se debió a mala praxis, sino a fallas con las válvulas y equipos que ya tienen muchos años. Casi un mes después del inci dente, la sala de lectura sigue cerrada. Las personas buscan los libros y deben subir a otros pisos para consultarlos. Una cinta amarilla marca el área restringida. Las butacas están protegidas con bolsas negras y en algunas secciones del techo se ven cables y tuberías. Los trabajos de modernización Âque servirán, entre otras cosas, para que el aire llegue al salón destinado a personas con discapacidad comenzaron a mediados de septiembre y se espera que terminen el 3 de noviembre. Los aparatos de aire acondi cionado son importantes para conservar los documentos. Para Ontiveros, el cierre de la sala es una molestia necesaria. Dice que hay que establecer prioridades en la intervención de la infraestructura, y esta es una de ellas. Afirma que no quiere que sean sólo paños de agua caliente, sino tratamientos profundos en una estructura que comenzó a funcionar en 1988. Por eso, además de las unidades de climatización en la sala de lectura, se instalarán repuestos en los sistemas de aire central. Tenemos nueve equipos tipo chiller, que son suficien tes. Con el paso del tiempo, se dañaba uno y se resolvía con otro; pero ya están...

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