La dirección de Zhang Yimou se mezcla con el encanto de Hollywood

Cuenta la historia que la Gran Muralla China fue construida y reconstruida duran te las dinastías imperiales para proteger la frontera norte del imperio chino de los nómadas de Mongolia y Manchuria.Inspirado en este proceso, sin mucho rigor y con amplio uso de los recursos tecnológicos, el director chino Zhang Yimou se embarcó en una aventura épica comandada por Matt Damon, con un personaje que, finalmente, no necesita que lo rescaten.El toque hollywoodense no se disimula. Los planos aéreos, los movimientos de los personajes y los coloridos trajes del Ejército chino le agregan valor a la imagen de los ambientes lúgubres y en tinieblas. Yimou remarcó las diferencias entre la cultura oriental y la occidental con los personajes principales, interpretados por Damon, Pedro Pascal, Willem Dafoe, Jing Tian, Andy Lau y Zhang Hanyu.Los occidentales llegaron pa ra conseguir un elemento mítico que les permitiría seguir su estilo de vida poco atado a las leyes. Se quedan, muy a su pesar, porque las habilidades con la flecha y arco de Damon resultan atractivas para el Ejército de la nación oriental.Historia en segundo plano. Ciencia ficción, fantasía, acción, aventura y misteriosos seres que rondan la imponente Muralla China son los elementos que logran mantener al espectador en su asiento durante 1 hora y 44 minutos.Sin embargo, los miles de ki lómetros de la gran construcción son una simple excusa para darle un poco de sentido a una película que sin las largas, agresivas y llamativas batallas se queda sin sustancia ni gracia.Los seres sobrenaturales que atacan a los defensores de la muralla son una mezcla de De predador 1987 con algunas ca racterísticas de los dinosaurios de Parque Jurásico 1993...

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