El encierro del adicto visto a través del arte

Una pared de bloques de yeso hechos por el artista Armando Ruiz bloquea el acceso a la galería Carmen Araujo Arte. Nadie puede entrar ni salir de la sala. Es una cárcel en la que apenas una rendija comunica el espacio expositivo con el mundo exterior, así como al espectador con la obra. En la muestra Adhesión, Ruiz recrea el encierro en sí mismo que experimenta la persona que es adicta a las drogas. La primera individual del artista ganador del Salón Jóvenes con FIA y del Salón de Jóvenes del Museo de Arte Contemporáneo del Zulia es una gran instalación que alude al consumo de cocaína y los estragos que causa en la sociedad. Para ello, el creador parte de una propuesta escultórica basada en la figura humana deshumanizada. Ruiz crea un cubo blanco con bloques de yeso una analogía entre ese material y las panelas de cocaína que contiene unos seres también blancos, cuyos cuerpos elaborados con tela están mutilados, no tienen rostros ni cabezas, y en lugar de extremidades tienen cuchillos. Muestro al adicto socialmente alejado, encerrado en su propio problema. Quitarles la cabeza es una manera de quitarles la racionalidad, de mostrar que actúan por impulso, sin pensar. El de la adicción es un tema que me toca de cerca, señala el artista que nació en Barranquilla y reside en Maracaibo. Las piezas muestran a las fi guras interactuando con otras: un muñeco con muletas, que en realidad son cuchillos que aplastan a un ser más pequeño, muestra al padre discapacitado que se apoya tanto en sus hijos que termina por aplastarlos. Una mujer devorada por un animal mitad boa, mitad pene alude a la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR