La entrega de los Grammy Latinos gozó de una apoteósica apertura

El inicio de la 12ª edición de los Grammy Latinos fue monumental. Casi 100 músicos de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, dirigidos por Gustavo Dudamel y acompañados por otros artistas, entre ellos el cuatrista Jorge Glem, le sirvieron de ropaje a la pieza Latinoamérica, de Calle 13, que más tarde se llevaría el galardón a la Mejor Canción del Año. Temprano, una vez que ter minó el ensayo general, Dudamel había manifestado: A simple vista, pareciera que el Sistema y Calle 13 son imposibles de unir. Lo que sucedió allá adentro fue que hicimos armonía, una magia única. Uno de los integrantes del dúo puertorriqueño, Visitante Âque en realidad se llama Eduardo CabraÂ, expresó: Ese tema significa mucho para nosotros y queríamos hacerlo con una gran orquesta. Tenía que ser con la Bolívar y con Gustavo. Glem, quien sí habló des pués de la presentación, que contó con arreglos del también venezolano Álex Berti, dijo que le enorgullecía la pre sencia del cuatro venezolano en un espectáculo tan publicitado: Gracias a Dios me correspondió tocarlo a mí, pero si hubiese sido otro venezolano, me hubiera emocionado igual. Cuando empezó la cere monia, Visitante y Residente Âquien lucía una franela que decía: Educación pública y gratuita ya llevaban un trecho andado en cuanto a premios. Al final, salieron con 9 aciertos en las 10 categorías a las que fueron postulados, incluido el premio al Mejor Álbum del Año, por su disco Entren los que quieran. Tam bién cargaron con los laureles a la Grabación del Año Latinoamérica, Mejor Álbum de Música...

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