Los grandes escenarios caraqueños no resuelven la escasez de salas

Teatro Municipal de Caracas . Antonio Guzmán Blanco quiso hacer de la capital una pequeña París y, en 1881, inauguró el Teatro Guzmán Blanco. El recinto tuvo que esperar 7 años para quitarse el nombre del Ilustre Americano y ser rebautizado como Teatro Municipal, denominación con la que sufrió más de 3 remodelaciones. Cerró sus puertas en 1988 y se reinauguró una década después. La sala que está ubicada en la esquina de Reducto a Municipal, en la parroquia Santa Teresa, tiene una capacidad de 1.259 personas, pero hoy sólo se utilizan 598 butacas. El sábado 19 y el domingo 20 habrá 2 únicas funciones de la pieza Agente libre en dos y el fin de semana siguiente se escenificará Pedro y el capitán Teatro Principal de Caracas . Fue una sala de cine durante los años noventa, pero se cerró y no reabrieron sus puertas hasta julio del año pasado. La remodelación formó parte de las obras conmemorativas del bicentenario de la Independencia. Esa noche se proyectaron sobre su fachada imágenes de Carlos Gardel, motivos indígenas y los rostros de Simón Bolívar y Francisco de Miranda. Es la sede de la Banda Marcial de Caracas y de la Compañía Distrital de Teatro, y en él se encuentran un restaurante y una chocolatería. El edificio en la esquina noroeste de la Plaza Bolívar fue construido en 1931 y remodelado en 1953. Tiene capacidad de 760 asistentes. Hasta hoy se presenta allí La tempestad Teatro Teresa Carreño . Un concierto de la Orquesta Sinfónica de...

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