Los estragos de la CIA

Mi familia y yo estábamos emocionados porque pasaríamos unos días en la casa de Emilio Lovera en San Antonio del Golfo, en el estado Sucre. Nos levantamos como a las 5:00 de la madrugada para aprovechar el tiempo, pero cuando estábamos llegando a Cúpira, increíblemente, todos los carros que venían en sentido contrario encendían y apagaban las luces indicando que algo malo pasaba delante. Pero, como venezolano al fin, uno cree que el problema que ellos están avisando no nos va a afectar y que uno sí va a poder continuar su camino y llegar. Media hora después, nos encontramos con que se había caído el puente de Cúpira y no había paso. Mis tres menores hijos, frustrados, comenzaron a llorar, porque durante meses habían esperado este viaje. Mi suegra y mi esposa también hicieron lo suyo: hipercuaimicamente no dejaron de reprocharme ni de acusarme, como si yo hubiese sido el que derrumbó el puente. ¡Yo te dije que saliéramos ayer...! ¡Ah!, pero no, tú siempre haciendo lo que te da la gana, ¡allí están las consecuencias...! Âgritaba ella con estridente voz aguda para hacerse oír por encima de los gritos de los niños. ÂEs que no me explico por qué mi hija se casó contigo. ¡Y mira que bastante que se lo dije...! De regreso nos topamos con una enorme cola, porque los que nos devolvíamos nos sumamos a los habitantes de Guarenas y sus alrededores, que también iban a Caracas. Esa noche tomamos una decisión violenta, sobre todo por los niños, nos levantaríamos a las 5:00 de la madrugada del día siguiente para ir a casa de mi hermano Raúl, que vive en Mérida. Amaneció lloviendo, pero así y todo fuimos vía los llanos de Barinas. Como a las 11:00 am ya estábamos en Barinitas, listos para subir la montaña hasta Mérida. La lluvia continuaba y, luego de cuatro horas de camino, de nuevo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR