Franz y Albert, el viaje por el abismo de dos genios

F ranz y Albert es el título de la historia. Así. Sus nombres a secas. Porque ellos aún no se han convertido en Kafka y Einstein, esos alucinantes personajes que marcaron el siglo XX.Es Praga. 1911. Se encuentran en la tertulia de los martes. Albert toca a Mozart en el violín.Franz se acerca entre fascinado y tímido; minutos antes había pensado en el suicidio. La razón en esos tiempos es un privilegio, se dicen en ese viaje profundo que emprenden y que constantemente bordea el abismo.Franz, un catálogo de humi llaciones -como él mismo se define-, todavía no ha escrito La metamorfosis . Albert esboza su teoría de la relatividad e intenta convencer a su interlocutor de que el movimiento por sí solo no existe; que en la dimensión espacio-tiempo nada se mueve.Estaremos observando todos los instantes, le dice. ¿Y entonces qué somos nosotros?, inquiere el atormentado judío nacido en Bohemia, mientras le habla de su propia realidad, esa que se le ha convertido en una prolongación de los sueños.Esta historia es un exquisito ejercicio de teatro de texto. Es también una gran propuesta actoral con la que Luigi Sciamanna y Antonio Delli llevarán desde hoy al espectador episodios de humor y culpa de estos dos genios universales. Franz y Al bert es una pieza escrita por el periodista y dramaturgo argentino Mario Diament y se presentará en el Trasnocho Cultural de Las Mercedes. La dirección es de Sciamanna y la producción de Cocó Seijas.La habilidad de la obra es que te encuentras con el personaje histórico para aprehender algo de él y ver cómo lo pones en el escenario. Cuentas al mismo tiempo con la libertad que te concede el autor de no tener el peso de la historia definitiva de esos dos seres, afirma el actor de insondables ojos azules.Franz y Albert son deliciosa mente distintos. El primero es vegetariano, pesimista y torpe; desconfía de las revoluciones. El segundo está loco, adora comer y no se siente ridículo al bailar.Uno hace de la desesperación una doctrina; el otro, del optimismo una religión, se escucha decir entre los diálogos.Durante la hora y media que dura la obra, ambos van paseando por diversos temas humanos: la política, la ciudad en...

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