Gego reveló las claves de la línea y el espacio en su obra temprana

En las obras de Gego las líneas van y vienen, se entrecruzan, se separan y se vuelven a juntar, como en un juego. Sus creaciones no tienen principio ni fin, y ese mismo concepto pareciera ser aplicable cuando se estudia su trayectoria entera. Esa es la tesis en la que se basa la exposición Procedencia y encuentro, que confronta los trabajos tempranos de la artista fechados en los años cincuenta con el lenguaje ya consolidado de las Reticuláreas, las Tejeduras, los Bichos y los Dibujos sin papel. La muestra de 108 obras en su mayoría pertenecientes a la Fundación Gego está enmarcada en la celebración del centenario de la creadora de origen alemán. El título parte de una frase que Gego escribió en tinta roja sobre un papel rasgado y que guardó en sus Sabidu ras como llamaba su archivo personal. A Josefina Manrique, curado ra de la exhibición, le vino como anillo al dedo la cita Procedencia y encuentro, pues deseaba hallar en las primeras piezas de Gego el origen, el génesis, las claves de su discurso plástico. Por ello rompió con el concepto de montaje cronológico y entremezcló trabajos de distintas épocas y formatos. Eso último, además, apunta al hecho de que el tema fundamental de la obra de la artista es el dibujo, el comportamiento de la línea en el espacio, sin reparar en que el soporte sea o no el papel. Es así como la muestra es tablece puntos de encuentro entre una acuarela sin título, fechada en 1953, con los estudios que la artista hizo en 1980 también en acuarela de la sala de la Galería de Arte Nacional donde desplegaría permanentemente su Reticulárea. Tras la mudanza de la GAN, la obra actualmente en restauración permanece en los...

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