El gobierno no tiene interlocutor que calme a los mercados

La caída de los bonos de la República y de Pdvsa ha significado pérdidas que lucen irreparables a corto plazo para los inversionistas. El valor de los papeles venezolanos ha descendido alrededor de 20 puntos desde junio, cuando el presidente Nicolás Maduro anunció el sacudón.Ante esta situación, lo más grave según analistas consultados es que con la salida de Rafael Ramírez no quedó en el gobierno un solo interlocutor que pueda calmar al mercado internacional.El economista Asdrúbal Oli veros considera que el temor del mercado tiene que ver con la imposibilidad del gobierno de obtener mayores recursos, dada la caída del precio del crudo. Los fondos extrapresupuestarios han ido mermando, tal como sucede con el Fonden, cuya partida ha disminuido 32,8% al cierre de julio y se ubican en 4,1 millardos de dólares.Agrega que gran parte del nerviosismo entre los tenedores de títulos de Venezuela está atada a la desconfianza que sienten ante la promesa incumplida del gobierno de tomar decisiones económicas para atacar la crisis de escasez, inflación y decrecimiento.El acercamiento que logró Rafael Ramírez con el mercado se evidenció en el road show de Londres, pero todo ese esfuerzo en el que se anunciaron medidas como la unificación cambiaria se echó por tierra por decisión del presidente Nicolás Maduro, dijo. Ahora no hay un solo funcionario que el mercado perciba como confiable. En condiciones normales ese funcionario debería ser el nuevo vicepresidente del área económica, Rodolfo Marco Torres, pero no parece tener la preparación para ejercer esa función.El también economista José...

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