Huecos: enemigos sobre el asfalto

Los huecos en las carreteras se han convertido en el enemigo más común de los vehículos venezolanos. Son especialmente peligrosos en las vías donde el tránsito circula a mayor velocidad. Los daños que ocasionan van desde la ruptura inmediata de alguna pieza hasta el desgaste acelerado del sistema de suspensión. Luis Moreno, mecánico automotriz y gerente de área de Tire Center en Los Próceres, advierte que el impacto causado por desniveles en el asfalto puede llegar a producir fracturas en la base del motor. Sin embargo, los cauchos, los rines y las piezas que componen la suspensión del vehículo suelen ser las víctimas más inmediatas. El sistema de amortiguación es el que más sufre. Eso se debe a que las piezas están diseñadas para comprimirse y expandirse con el objetivo aliviar los efectos de transitar por superficies irregulares. Sin embargo, se pueden partir o doblar al caer en huecos grandes. A partir de allí el resto de los componentes de la suspensión comienzan dañarse. Puede que los efectos no se vean de manera inmediata, pero a la larga los huecos reducen la vida útil de los repuestos y son la primera causa de que un vehículo necesite alineación. Irregularidades en el asfalto también pueden producir ruptura de rines y daños permanentes en la dirección que conllevan a que los cauchos se desgasten prematuramente y el vehículo presente problemas en la conducción.

Villanos silentes. Moreno explica que los abultamientos en el asfalto, intencionales o no, producen el mismo daño que un hueco. Los famosos reductores de velocidad Âtambién conocidos como "policías acostados"Â son más perjudiciales si el vehículo pasa rápido sobre ellos. La mayoría son inofensivos si la persona va a menos de 15 kilómetros por hora. En Venezuela no siempre colocan la debida señalización en los reductores de velocidad. Es por eso que lo más importante, sobre todo si no se conoce el área por la que se transita o si se trata de una zona residencial, es mantener un ritmo prudencial. "Pueden ocasionar ruptura de rines y pérdida inmediata de cauchos", advierte Moreno. Además, daños en la suspensión, y al igual que la expansión repentina que puede causar un hueco, una contracción inesperada puede doblar la pieza.

Qué observar. Si no hubo manera de esquivar el hueco o abultamiento el vehículo detectará con facilidad...

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