Huevos de oro

La gallina que Francisco Arias Cárdenas usó en la campaña electoral de 2000 como símbolo de la cobardía que él le atribuía a su entonces contrincante, Hugo Chávez, está empollando oro en el Zulia. El 11 de enero de este año, Chávez se ratificó como presidente del PSUV No tengo escapatoria, dijo, y nombró a Arias Cárdenas vicepresidente del partido en la región occidental: Táchira, Zulia y Mérida. Entre las líneas estratégicas de acción política del PSUV, que recibieron los encargados de las diferentes regiones del país, está, según declaró el propio Chávez, el cometido de convertir el partido en un verdadero medio de propaganda y fortalecer el poder popular. Ya en diciembre del año pasa do, Arias había sido nombrado, en comandita con Gian Carlo Di Martino, comisionado presidencial para la recuperación del Sur del Lago de Maracaibo tras las lluvias del último trimestre de 2010. Con tales credenciales y un dineral cimarrón de contabilidad, el ex candidato del ave de corral se instaló en el Zulia. Llevaba dos mandatos y un proyecto propio. Las órdenes apuntan a acabar con las rencillas del PSUV en ese estado occidental y conseguirle votos a Chávez para 2012. Y la agenda guardada en el doble fondo es la misma de siempre: ver cómo rasguña poder para él, aun a costa de arrastrarse de vientre por los barriales de Encontrados, El Guayabo, Santa Bárbara y sus anegadas inmediaciones. Arias Cárdenas es uno de los virreyes que el Ejecutivo ha impuesto a los mandatarios locales para darles un rodeo y hacer como que no existen; y para sabotearlos con el dinero del Gobierno central, que se les niega en los presupuestos ordinarios. En su caso, el cuadro se complica por su falta de talento, su ausencia total de escrúpulos y sus ansias de poder, todo disuelto en el desprecio que dispensa a quienes lo rodean por considerarlos inferiores. Esto constituye una mezcla que lo ha llevado a grandes ridículos, como la aludida campaña electoral de 2000, cuando aparecía en un set de televisión compartiendo con una gallina. Su tesis de entonces apuntaba a que Chávez, además de correlón cosa que nadie le ha rebatido estaba loco. Pero ya antes lo habíamos visto coquetear con la candidatura de Irene Sáez, a quien escoltó hasta que las encuestas le...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR