Intrahistoria

Intrahistoria, según el Diccionario de la Real Academia DRAE, es voz introducida por el escritor don Miguel de Unamuno para designar la vida tradicional que sirve de trasfondo permanente a la historia cambiante y visible. Se pudiera agregar que es también la vida cotidiana.Unamuno utiliza el concepto en su primer libro de ensayos En torno al casticismo 1895, en el cual afirma: Los periódicos nada dicen de la vida silenciosa de los millares de hombres sin historia que a todas horas del día y en todos los países del globo se levantan a una orden del sol y van a sus campos a proseguir la oscura y silenciosa labor cotidiana ... esa vida intrahistórica, silenciosa y eterna es ... la verdadera tradición, la tradición eterna, no la tradición mentira que se suele ir a buscar al pasado enterrado en libros y papeles y monumentos y piedras.Como todo lo histórico, la intrahistoria va cambiándose a sí misma, es dialéctica. En ella se unen la vida tradicional y sus valores y el afán de cada día, el ajetreo diario. Este último ya no es predominantemente ir a los campos sino a la parada de autobús para dirigirse al sitio de trabajo.Es tanto la hermosa tradición venezolana de pedirle la bendición a la madre al salir de la casa como el sumergirse en la vorágine de automóviles, motos y busetas de la calle.Sin menoscabo de la profun didad y seriedad del concepto de intrahistoria de Unamuno, que remite a nuestras raíces hispanas, católicas e indígenas, podemos observar cómo la intrahistoria de los venezolanos se ha modificado en los últimos años para convertirse en un tormento. En el diario vivir el dar los buenos días ya no es un saludo sino una indagación sobre en cuál campo de la polarización ubicar al vecino.Pero no sólo eso. El hacer cotidiano consiste en enfrentar las carencias más insólitas: el corte de la luz, la falta de agua, la cola en el abasto o en el supermercado, el alza de los precios. La precariedad tanto de la vida como de las condiciones vida se ha vuelto parte del quehacer rutinario que conforma la realidad silenciosa de cada uno de los que habitamos este suelo.La historia, con H mayús cula, que pretenden acelerar los autodenominados revolucionarios se hunde en la intrahistoria de miserias que debemos padecer todos los días.Por ello suenan huecos los discursos de epopeyas y amenazas que pronuncian líderes y aspirantes a caudillos.La contradicción entre una intrahistoria en la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR