Lara comenzó el torneo con el santo de espaldas

La falta de descanso afectó la moral de la plantilla del Deportivo Lara. No es que el cuadro crepuscular no haya tomado vacaciones para el cuerpo, pero la mente, esa tan importante a la hora de hacer las cosas en el balompié, siguió agobiada entre deudas, dudas, impagos y sufrimiento. El equipo campeón de la temporada pasada cayó ayer 2-1, a manos del único equipo que supo cómo hacerle daño la temporada pasada, el Anzoátegui. Gelmin Rivas puso las dos dianas del cuadro de Daniel Farías, a los 15 y a los 45+2 del primer tiempo. El descuento crepuscular, que vio cortada una cadena de 17 juegos invicto de local, llegó en las botas de Edgar Pérez Greco a los 17 de la primera mitad. El choque fue un toma y da me desde el arranque, con los tantos...

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