Carlos Maldonado se adapta a los cambios en la familia y en el fútbol

Carlos Maldonado regresó a Puerto Ordaz en julio, pero no lo hizo por nostalgia. El laureado técnico ya había dirigido a Mineros de Guayana en 2003, primero como DT de emergencia para salvarlo del descenso y luego para quedar a un paso del título del Apertura de ese año. La verdadera razón del retorno del ex camiseta 10 de Táchira fue familiar. O mejor dicho, un cambio de planes de la familia. "Yo me iba a España para estar con mi hija (Carla), que se había ido a ese país. Pero entonces surgió la posibilidad de que ella hiciera un curso en Inglaterra, y hasta allá si no la podía seguir", comentó Maldonado. Después de guiar al Táchira a una nueva estrella en 2008 y poder devolver a su querido equipo al rol protagónico que había perdido en los últimos años, se cumplía el final de esa etapa de Maldonado en San Cristóbal. Y de inmediato surgía la propuesta de dirigir a Mineros, una oferta que aceptó, pero no de inmediato. "Cuando cambió el plan de mi salida, pensé que no me iba a quedar en San Cristóbal sin hacer nada, así que tomé esta oportunidad con Mineros, que era una oferta que había declinado antes porque me iba del país", afirmó. Mientras Maldonado lucha por convertir a Mineros en un candidato a títulos, no olvida su plan original. "Todavía tengo pensado irme del país para acompañar a mi hija en España, pero no sé cuándo será. Lo haré por un tiempo, aunque sea unos meses", aseguró. "Cuando yo era jugador, mis hijos se adaptaron a mí por tanto tiempo que ahora nos toca a los padres adaptarnos a ellos. Con Giancarlo es distinto, escogió la carrera del futbolista, que implica viajar y...

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