Las manos son también instrumentos para el placer

Sandra y Mario se adentran dos veces a la semana en sus secretas aventuras de placer sin llegar al territorio de la penetración vaginal, anal o de la felación. Enganchados desde hace meses en un noviazgo, la pareja explora lo que parece ser ahora una tendencia muy de moda entre jóvenes. De modo que en vez de desnudarse, lanzarse a la cama y tomar el tren más rápido hacia el orgasmo, estos caraqueños, que no pasan de los 25 años de edad, reeditan la práctica más antigua para procurarse otro tipo de goce: la masturbación. Es fabuloso porque hasta ahora lo habíamos hecho a escondidas y hasta con miedo a que uno de los dos sorprendiera al otro, confiesa Sandra, al resumir eufórica y sin tapujo lo que denomina una prolongación del sexo hasta el final. Ignoro si se ha convertido en una tendencia, pero desde hace tiempo aconsejo la técnica de estimulación mutua cuando me visita un matrimonio, cuya primera cla ve es el aburrimiento: hacen siempre lo mismo, a la misma hora y en la misma posición, responde el sexólogo Luis Alfredo Pomenta, al advertir que la práctica de tocamientos que elude la penetración vaginal, anal u oral puede convertirse en agradable experiencia para complacer a la pareja sin tener que preocuparse por posiciones sexuales, métodos anti conceptivos, el embarazo no deseado y otras inquietudes que arruinan las horas intensas de placer. Onán reinvindicado. En el siglo XXI quedan pocos que mencionen la masturbación como vicio o enfermedad. Pero unos años atrás, padres y docentes acusaban a esa válvula de escape de provocar daños físicos y mentales se la culpaba de melancolía, histeria, ceguera. Hasta que los trabajos documentados del estadounidense Alfred Kinsey revelaron que se trata de una práctica muy común, al punto de que 9 de cada 10 varones y 6 de cada 10 chicas han montado alguna vez la fiesta con sus genitales. Tan útil ha sido reconocer su importancia que Pomenta la premia por sus buenos oficios en la terapia sexual para tratar la anorgasmia, eyaculación rápida, disfunción eréctil y fobias sexuales. El especialista afirma que hoy, cuando se puede hablar del tema sin sentir vergüenza, la masturbación retoma el sitial que por tiempo le había sido negado. De hecho, la estimulación de los órganos genitales constituye nuestra primera experiencia sexual, aun a los primeros meses de nacidos, de modo que celebro que sea incorporada a la...

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