Merecemos respeto

Durante estos casi 14 años de la revolución bolivariana, los ciudadanos hemos sido tratados cada vez más como súbditos, con excepción de los que forman parte de los liderazgos en las instituciones del Estado: ministros, altos militares, ejecutivos de institutos autónomos, diputados, etc., en breve: los gobernantes. Se ha venido instalando un clima en el que la gran mayoría, allegados del proceso incluidos, está excluida de los acontecimientos políticos, tanto en lo que se refiere a las informaciones que se le dan como, más aún, en las decisiones que atañen a todos. Lo que algunos han llamado el apartheid político no sólo afecta a los que estamos del lado de la alternativa democrática, sino también a los que aún militan en las filas del chavismo. Las pruebas de esta afirmación son numerosas. Una primera es la forma como el máximo líder de esa casta de gobernantes, el que se autodesigna comandante-presidente, suele dirigirse al pueblo: sus múltiples y repetitivas intervenciones son una combinación de órdenes a los que le siguen y de insultos a los que lo adversamos. Sería interesante e importante hacer un análisis de contenido de las cadenas, de los programas de Aló, Presidente y de tantas otras de sus comunicaciones verbales. Claro que las órdenes y los insultos están mezclados con las promesas, dirigidas fundamentalmente a los que le siguen todavía para que no lo abandonen. El aparato técnico y legal de esta propaganda puede competir, pienso que victoriosamente, con los de Hitler-Goebbels de la Alemania nacionalsocialista y las hegemonías comunicacionales de los Estados del totalitarismo comunista. Una segunda prueba es la forma como los gober nantes suelen manejar la toma de decisiones de envergadura. Me limito a un ejemplo de reciente data: la elaboración de la Ley Orgánica del Trabajo. Una vez más, un pequeño círculo de ellos, convocado por el máximo líder, se encarga de su redacción, sin consultar las opiniones de los afectados: sindicatos y ONG de obreros y trabajadores, tanto del...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR