«El ministerio cedió la UNEY como si se tratara de una franquicia»

Un oficio del ministerio señala que tienen nuevos planes para Yaracuy, pero no conocemos esos planes y pensamos que no deben hacerse a espaldas de la universidad. Esas fueron las palabras que Freddy Castillo Castellanos pronunció ante la prensa cuando se hizo pública su destitución del cargo de rector de la Universidad Nacional Experimental de Yaracuy, de la cual es fundador. Un mes después insiste en la ilegalidad de la medida que se extendió a toda la directiva, mientras en la casa de estudios persisten las protestas y no se ha cumplido con la formalidad de juramentar a las nuevas autoridades universitarias. El abogado y académico especializado en temas culturales y gastronómicos asegura que lo ocurrido es producto del sectarismo político. --Ha transcurrido un mes de la destitución de la directiva de la UNEY. ¿Ha habido algún acercamiento entre el Ministerio de Educación Universitaria y las autoridades salientes? --Estas son horas en que la titular del Ministerio de Educación Universitaria ni siquiera conoce las instalaciones de la Universidad de Yaracuy, menos aún su trayectoria académica, sus programas, sus propuestas, sus publicaciones, sus innovaciones y su gente. Al parecer, el método que aplica ese despacho es elaborar planes por su cuenta, publicarlos en Gaceta Oficial e imponerlos después sin debate alguno. El acercamiento, el diálogo o la mera visita para explorar el terreno que se invadirá Âporque de eso se trata no lo incluyen en su agenda autoritaria. Ante la indignada resistencia de la comunidad académica, el ministerio lo que ha hecho es dar bandazos con sus vagas e inconsistentes explicaciones para mantener una intervención que amenaza con dar al traste con importantes programas académicos. No ha habido ningún asomo de rectificación. --¿Cómo se produjo su destitución? --Nuestra salida ocurrió en vacaciones, a pesar de que habíamos sido designados por un período determinado que vence en noviembre de 2012. Por lo general, las autoridades de las universidades experimentales son nombradas por tiempo indefinido, pero este no era el caso de la UNEY, por sabia decisión, primero del ex ministro Héctor Navarro y luego del ex ministro Luis Acuña. Aparte de ese hecho jurídicamente grave, que vicia de nulidad la resolución del ministerio, ésta se produjo sin que se hubiera hecho evaluación alguna de nuestro desempeño ni del funcionamiento de la universidad, como lo admitió socarronamente el viceministro Rubén Reinoso. Pero debo...

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