¿Y las mujeres?

Tengo claro que se trata de dos casos de refugiados que no están para nada emparentados ni gozan en común de nada distinto a tener que huir del lugar donde vivían, y ello causado por dos dictadores camuflados. El uno, un tirano aterrador y de verdad; el otro, más bien un Stalin de carnaval o pacotilla, pero también de verdad. El primero ha llevado a cientos de miles de sus ciudadanos a escapar de la muerte, y el segundo ha expulsado a miles, obligándolos a abandonar sus pertenencias y regresar a la que fuera su patria sin razón alguna, por motivos meramente político-electorales. Son dramas incomparables, pero son dramas.Fotos hay de los unos y los otros cruzando fronteras. Y aquí es donde encuentro la diferencia más significativa.Bueno, en realidad fue la revista Der Spiegel la que cayó en cuenta del detalle. Si miramos con detenimiento las muchísi mas fotos de los refugiados sirios en las estaciones de tren o en los cambuches en Budapest y Viena, veremos aquello que destaca el hebdomadario alemán: padres, hijos, abuelos y yernos son la gran mayoría, escasean las madres, hijas, abuelas y nueras. Es como si...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR