Imperdonable negligencia

Con gran asombro e indignación los venezolanos hemos visto algo que ocurre desde hace tiempo y hasta pasaba inadvertido, aun cuando lo que está en juego es la vida e integridad física de los ciudadanos. Nos referimos a la falta de mantenimiento y de adecuada supervisión de los medios de transporte, lo cual, hasta la fecha, ha traído la terrible consecuencia de que en menos de 8 días 6 aviones comerciales, unos de aerolíneas estatales y otros de privadas, se accidentaron por fallas; un terrible choque de trenes que cobró 1 vida y causó 17 heridos, al parecer por posibles fallas en los sistemas de freno aún no se han confirmado las razones, y la colisión del Trolebús de Mérida contra una vivienda, lo que dejó otros heridos. Por mucho que se quiera jus tificar y separar cada evento como si se tratase de hechos aislados, hay que señalar que tienen un hilo común: todos los sistemas de transporte están regulados, supervisados e inspeccionados por el Estado venezolano. Poner a volar aviones viejos, con requerimientos técnicos no cubiertos y, según la asociación de pilotos, con fallas predeterminadas, constituye una irresponsabilidad que, más allá del encuadre...

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