No me gusta tomar un solo camino

Sin ninguna expectativa más allá de compartir con sus seguidores una faceta hasta ahora inexplorada, hace casi un año Daniela Bascopé publicó en Internet el disco Ven. El lanzamiento de la producción coincidió con su regreso a Venezuela para ser protagonista de la telenovela de Venevisión El árbol de Gabriel. En medio de las grabaciones, la artista se escapaba de vez en cuando pero no sólo para estudiar los libretos de la telenovela sino también para ensayar las canciones de su propia autoría. Se presentó algunas noches en bares y restaurantes de Caracas, Barquisimeto y Puerto Ordaz, sitios donde dejó de ser actriz para explorar a fondo otra inquietud artística que despertó en ella hace tres años en un viaje a Barcelona, España. En las presentaciones espo rádicas y por medio del boca a boca la gente empezó a enamorarse de su voz y de temas como Playa, Swing de la embriaguez y Amor vapor. Me pasaron cosas bellísimas. Por ejemplo, en los shows en bares pequeños le daba el micrófono al público para que cantara el coro de alguna pieza. Eso es súper gratificante. Ver cómo una letra que nació en la madrugada después es repetida por desconocidos que se la apropian. Es una maravilla, expresa. Hoy Bascopé afronta otro re to. Se presenta ante el...

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