No hay placer en los actos de violación

Todas las mañanas abro la ventana para que entre el aire y se lleve mis pesadillas. Con esa frase, escrita el 21 de octubre, Milena dejó estampada en su blog La noche larga parte de los tormentos que la acosan tras el abuso sexual padecido hace siete años. Abogada, 33 años de edad y dos noviazgos que no llegaron a feliz término cuando les confesó su tragedia, esta caraqueña que aguarda la llegada del crepúsculo para recogerse en su casa y volcarse a escribir, no olvida la noche cuando fue abordada por cuatro sujetos a la salida de la UCV y llevada en una camioneta hasta la vía que conduce al embalse de La Mariposa, donde fue golpeada, despojada de su vestimenta y, finalmente, ultrajada. Es mentira que desapa rezcan las marcas de la violación, responde Milena con una sonrisa amarga que congela el cuerpo. Aunque, con ayuda psicológica logró salir airosa del llamado trastorno postraumático, ella forma parte del sombrío club de las 24 venezolanas que a diario denuncian haber sido abusa das sexualmente. Los expertos suponen que 1 de cada 3 víctimas da ese paso. El resto permanece en silencio. De modo que las cifras de violación en el país son alarmantes. ¿Placer a la fuerza? La viola ción se define como la penetración no permitida oral, anal o vaginal, que se obtiene me diante la fuerza, por amenazas de daño corporal o cuando la víctima es incapaz de dar su consentimiento. Se trata de un delito grave, una experiencia traumática que no puede ser fácilmente olvidada. El acto puede dejar a una persona llena de miedo, dudas e ira. Detrás de muchas...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR