La partícula de Dios y la obra de Rolando Peña

Si hay un asunto cada vez más inquietante para los seres humanos es la pregunta sobre la realidad. Lo es porque nos encontramos en un siglo donde tenemos menos seguridades y más preguntas. Porque el avance del conocimiento nos ha lanzado hacia un cosmos donde nuestras referencias están condicionadas en gran medida por los códigos que nos hacen humanos y quizá ya hiper-humanos: el lenguaje, lo digital, lo mediático y lo estético. También, por la transformación que ha sufrido nuestro modo de percepción y producción cultural: vivimos en la era de lo trans, lo multi, lo cyborg, lo participativo, lo performancial, lo apropiado, lo reciclado, lo aumentado o reducido y todo aquello que pueda ser simulacro. Y, fundamentalmente, porque los avances científicos nos han conducido a espacios de nuestra existencia inimaginados siglos atrás. Hoy la Organización Eu ropea para la Investigación Nuclear CERN ha presentado un resultado apasionante: los experimentos Atlas y CMS develaron la presencia de una nueva partícula que puede ser el Bosón de Higgs o Partícula de Dios, como la llamó el físico Leon Lederman. Fabiola Gianotti, vocero de Atlas, lo anunció de esta forma: Hemos observado señales claras de una nueva partícula, en el nivel de 5 sigma, en la región de la masa alrededor de 126 gigaelectronvoltios GeV. El excelente trabajo del LHC y Atlas y los grandes esfuerzos de muchas personas nos han llevado a esta emocionante etapa. La agitación frente a semejante avance es porque de confirmarse el descubrimiento en los trabajos que realizarán durante los próximos meses estaríamos, en palabras del astrofísico del IVIC Claudio Mendoza, sujetos a la posibilidad de que el Modelo Estándar de la Materia que de establecido firmemente. Para RolfHeuer, director del CERN, con este paso han descubierto nada menos que un hito en la comprensión de la naturaleza. La conexión de Rolando Peña Desde la última década del siglo XX el maestro Rolando Peña ha trabajado con ahínco este tema junto al científico Claudio Mendoza. Lo ha hecho siguiendo la propuesta iconográfica que extrajo del petróleo en los años ochenta. De sus investigaciones y proceso creativo han salido las obras El modelo estándar de la materia: tributo al siglo XX, Ruptura espontánea de la simetría: El Barril de Dios y DarkEnergy: tributo a Albert Einstein. Cada una de ellas inmersas en el prodigioso laberinto de la mecánica cuántica, cuya complejidad llevó al premio Nobel norteamericano Richard P. Feynman a...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR