Pdvsa hipotecada

Ante interrogantes periodísticas sobre el monto de la deuda de la industria petrolera, que asciende a 34 millardos de dólares, el ministro de Energía y presidente de Pdvsa contestó, sin el más mínimo rubor, que esa deuda está respaldada por activos y patrimonio, lo que probaría en su opinión que "no está quebrada". En efecto, no está quebrada. Constituiría un récord mundial quebrar una empresa que posee las mayores reservas mundiales de petróleo cuando el precio del crudo supera los 100 dólares por barril. Pdvsa lo que está es hipotecada, porque el patrimonio y los activos que respaldan la inmensa deuda contraída pueden hacerse exigibles y dejar de estar controlados por la tan cacareada soberanía nacional. Aparentemente, como una preparación para esa contingencia, la empresa que "es de todos" se dispone ahora a incorporarse a la Bolsa de Valores de Hong Kong y hace un inventario de los bienes y proyectos que pudieran salir a remate, como el propietario de una casa hipotecada que maniobra para evitar entregársela al banco.

En 1979, cuando asumió Luis Herrera Campíns, sorprendió a la opinión pública al declarar que recibía un país hipotecado. Desde entonces comenzó la decadencia económica de Venezuela, independientemente de que el diagnóstico del presidente Herrera haya sido acertado. Porque una hipoteca implica el riesgo de perder la propiedad, y ante esa eventualidad a menudo se cometen errores. El asunto es más grave cuando lo hipotecado es la principal fuente de ingresos de un país y su recurso natural más valioso, porque equivale a hipotecar la...

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