Política entra en las aulas

En algunos planteles han prohibido que los alumnos hablen de políti ca, porque también a ese nivel se han producido enfrentamientos verbales y rechazo entre las opciones actualmente existentes. Sin embargo, la restricción no ha servido de mucho, porque al salir del plantel participan en protestas, cacerolazos, cohetazos y marchas.También los estudiantes usan las redes sociales para expresarse y ya no se trata de comentar un concierto, una película, una clase o profesor que no les gusta, ahora hacen referencia a un hecho político y, en muchos casos, con expresiones de odio, replicadas cientos de veces a través de los retuits.El doble discurso, igualmente, crea confusión.Por un lado se les quiere enseñar a los estudiantes normas de convivencia y de buena educación, pero por televisión ven cómo los diputados se caen a golpes en la Asamblea o protestas en la calle que terminan a peinillazos.La política ha vulnerado la intimidad familiar. A toda hora se habla sobre el tema en la casa, en el carro, en las comidas o en la cama. Los mismos padres han involucrado a los hijos. Hemos visto niños en edad escolar que asistieron a los funerales, vieron el cadáver y vivieron las expresiones dolor por la muerte del Presidente de la República.Las consecuencias sobre la salud física y mental ya forma parte de la agenda de...

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